Alta médica
El día 12 de Agosto de 2007 tuve un pequeño "percance" con la moto, como ya he ido contando desde hace un año mas o menos.
Os he contado mi hospitalización, mi operación, mis aventuras de convaleciente, mis continuas visitas al médico, mi rehabilitación y por fin, puedo decir que me han dado el alta médica. :-D.
Ayer tuve cita médica, la cita anual. Después de esperar pacientemente mi turno, llegar a las 8.40h a mi cita en rayos para las placas, por cierto, bastante puntuales. De volverme a mi casa, ya que no fueron capaces de darme cita seguida y hasta las 11.45h no tenía la cita con el traumatólogo. Gracias a Dios, vivo relativamente cerca del hospital. Después de bastante tiempo en la sala de espera y de leerme el periodico de cabo a rabo, llegó mi cita.
Y esto es sin ningún rencor, pero a todos aquellos que dicen que vivimos en un país diferente de España, ayer me tiré dos horas en la sala de espera del hospital. Vaya, que creo que la sanidad vasca anda parecida a todas las demás estatales.
Siempre me he sentido muy bien tratado en el Hospital de Basurto y por eso aún estando en mi derecho de protestar por haber tenido que perder una mañana entera para unos quince minutos efectivos de cita, ni me lo planteé.
Bueno, pues eso, que por ahora, llevaré mi tornillería encima, pero ya tengo el alta. No podré volver a correr ni saltar mucho, pero bueno, podré volver a coger la "burra" y poco a poco, volver a subir los puertos de montaña emulando a Contador o Samu. :-D.
Para el siguiente post, la sala de espera, ese lugar tan peligroso para empatizar. ;-)
Os he contado mi hospitalización, mi operación, mis aventuras de convaleciente, mis continuas visitas al médico, mi rehabilitación y por fin, puedo decir que me han dado el alta médica. :-D.
Ayer tuve cita médica, la cita anual. Después de esperar pacientemente mi turno, llegar a las 8.40h a mi cita en rayos para las placas, por cierto, bastante puntuales. De volverme a mi casa, ya que no fueron capaces de darme cita seguida y hasta las 11.45h no tenía la cita con el traumatólogo. Gracias a Dios, vivo relativamente cerca del hospital. Después de bastante tiempo en la sala de espera y de leerme el periodico de cabo a rabo, llegó mi cita.
Y esto es sin ningún rencor, pero a todos aquellos que dicen que vivimos en un país diferente de España, ayer me tiré dos horas en la sala de espera del hospital. Vaya, que creo que la sanidad vasca anda parecida a todas las demás estatales.
Siempre me he sentido muy bien tratado en el Hospital de Basurto y por eso aún estando en mi derecho de protestar por haber tenido que perder una mañana entera para unos quince minutos efectivos de cita, ni me lo planteé.
Bueno, pues eso, que por ahora, llevaré mi tornillería encima, pero ya tengo el alta. No podré volver a correr ni saltar mucho, pero bueno, podré volver a coger la "burra" y poco a poco, volver a subir los puertos de montaña emulando a Contador o Samu. :-D.
Para el siguiente post, la sala de espera, ese lugar tan peligroso para empatizar. ;-)
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