T4

El mes pasado nos fuimos a Praga a pasar unos días, dicho así, parece que fueramos habitualmente a pasar días por ahí, vamos, que fuimos de vacaciones y tuvimos la maravillosa experiencia de conocer la T4.

Viajamos de Bilbao a Madrid y de Madrid a Praga. La escala que teniamos era de 2 horas. Cuando pillamos los billetes, pensamos que tiempo de sobra, hay está nuestro primer error, pensar.

Según aterrizó el avión, la azafata, bueno, la auxiliar de vuelo, nos dió indicaciones de los vuelos que salían con enlace y cuales eran las puertas de embarque, de la nuestra no dijo ni pio. Buenos Aires, Cuba, Nueva York-JFK, Quito, Malaga, Alicante, Sevilla, ... En fin, de Praga, nada. Y avisó que para los viajeros internacionales, el transito era de al menos media hora. Uy, que mal sonó eso.

Salimos del avión y nos vamos a ver una pantalla de información, por cierto, pequeñas y escasas. Decía que era la zona S, no había puerta de embarque, pero era la zona S. Miramos los carteles indicadores, por cierto, muy bien indicado todo, y vemos, puerta S - 30 minutos. Ale, tranquilos, que temos hora y media.

Segumos las indicaciones y llegamos a ..., UN TREN. Nos montamos en el tren que te lleva de la T4 nacional a la T4 internacional, jodete, no hay una T4, son DOS.

Bueno, ya en la T4 internacional, de ahora en adelante, T4I y nos dijimos que volviamos a mirar la puerta de embarque, que faltando una hora, si señores, sólo quedaba ya una hora, ya estaría asignado el embarque ..., otra vez error, todavía no había puerta.

Bueno, pues eran ya las dos y media y nos sentamos a comer un bocata, con una de las escasas pantallas al lado por si acaso. 50 minutos para el embarque y ..., nada, 40 minutos y NADA. Ya por fin, cuando faltaba media hora, apareció la puerta. De lo malo, malo, nos habiamos quedado mas o menos a la mitad de la zona S, así que llegamos bien.

Por cierto, esto a la vuelta, como ya habreis comprobado la gran mayoría, volvimos, ;-), fue mucho mejor porque volviamos con retraso de Praga, pero como siempre, Iberia no nos falló y el avión de vuelta a Bilbao salió con una hora de retraso.

Nos quedaba el tiempo justo de fumarnos un cigarrito en esos miniguetos de fumadores con miniceniceros con colillas rebosando. Al final la gente apagaba el cigarro en cualquier sitio, incluso en la zona de aspiración de humo, ya que no había dónde dejar la colilla.

De mientras, escuchas esos mensajes que te dicen que tengas cuidado con tu equipaje de mao y no lo pierdas de vista. Serán cabrones, después de hacerte pasar casi, casi, con el DNI y la trajeta de embarque en la boca y las manos detrás de la cabeza por los controles, sólo faltaría que alguien te robase la bolsa dentro de la terminal. "Quitese el cinturon y el reloj", "saque las monedas del pantalón", "¿Llaves?". A veces te quedan ganas de decirles que si quieren, pasas a lo Enrique Iglesias por el escaner y que así verán los detonadores que llevas para volar el Guggenheim, pero tu sentido común te dice que es mejor no tocarles los huevos a la gente que va armada ..., a parte, después de lo de la peluquera gallega, mejor no tentar a la suerte. ;-)

A lo que ibamos, tercer error, nos quedaba bastante mas tiempo, aunque eso es cosa para otro día, porque en el embarque apareció una especie de José Luis de Vilallonga en "Desayuno con diamantes", pero con la edad de Vilallonga de ahora y con su "mujer" Brasileña de 20 años (en los 60 se le llamaba "sobrina"). ;-)

Hasta pronto (eso intentaré)

Comentarios

Entradas populares de este blog

Txikitofest I

De ascensores y bicicletas

Ciclismo y seguridad vial